Afirma que la advertencia se la hizo para que no le tocaran a su gente en las cárceles, las que, según la procuradora, ignora cuales son
La procuradora general, Miriam Germán Brito, reveló hoy que lo que más le «preocupa» de la amenaza que ha recibido es que quien le escribió por WhatsApp le dijo que le podía «mandar a matar a su hijo».
La máxima representante del Ministerio Público dijo que quien la contactó le advirtió que si «tocaba su gente» en las cárceles «se iba a resolver con sangre» y no con la de ella.
«Fue alguien que me mandó un mensaje por WhatsApp, diciéndome que, si le tocaban a su gente, no sé quiénes son sus gentes en las cárceles, eso se iba a resolver con sangre y que no era la mía, el que escribía, lo dijo, así mismo: «Yo le puedo mandar a matar a su hijo», dijo Miriam Germán.
La magistrada afirmó que esa advertencia fue la que más le preocupó.
Germán recibió la mañana de hoy a un grupo de personas simpatizantes de la Marcha Verde, en la sede de la Procuraduría General, quienes le mostraron su apoyo en su lucha contra la corrupción.
La amenaza a Germán Brito supuestamente proviene de un narcotraficante dominicano residente en España.
Aunque no ha sido confirmado por el Ministerio Público, se ha dicho que se desvinculó un miembro de ese organismo de persecución que diligenciaba los negocios del narcotraficante en las cárceles.
El hijo de Miriam y del que se vio obligada hablar
Esta es la segunda ocasión que la procuradora general se ha visto obligada a referirse a sus hijos, sobre todo al único varón que posee y que tiene una condición especial.
Orlando, como se llama el varón de los tres vástagos que posee, fue objeto de cuestionamiento durante la entrevista que le hizo su predecesor en la Procuraduría, Jean Alain Rodríguez, que acusó a la entonces jueza de la Suprema Corte de Justicia de transferir bienes que no podía justificar a su hijo.
La acusacion a Miriam Germán se la hizo Rodríguez frente al presidente de la República, Danilo Medina, quien encabezaba el Consejo de la Magistratura (CNM) que evaluaba a los jueces que aspiraban a continuar en la alta corte.
La entrevista ha sido mencionada por el exprocurador en los últimos tres años para atribuir su acusación de corrupción a una persecución de Germán Brito.
Asimismo, sectores han señalado que los fuertes cuestionamientos y las acusaciones a Germán Brito en el CNM fueron consecuencias de sus pronunciamientos cuando se desempeñaba como presidenta de la Segunda Sala Penal de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) al emitir un voto disidente en el caso Odebrecht.
Germán Brito advirtió en ese entonces que el Ministerio Público que encabezaba Jean Alain no conseguiría una condena en el caso Odebrecht, porque «la mayor parte de las pruebas» eran «fruto de delaciones premiadas que se han vertido en Brasil, pero una por una no contienen afirmaciones tajantes y precisas sobre actividades de los imputados. Abunda el ´yo creo´, ´me parece´, dijo.